Los vinos de Jerez, únicos en el mundo, sólo se producen en la región vitivinícola del Marco de Jerez, situada en el triángulo formado por las localidades de Jerez del Frontera, Sanlúcar de Barrameda y El Puerto de Santa María y abarca, además las localidades de Chiclana, Chipiona, Puerta Real, Rota, Trebujena y Lebrija.
El Consejo Regulador de la Denominación de Origen, el más antiguo de España, certifica la calidad y el origen de estos vinos que hunden sus raíces en la Historia. El Jerez ha brillado con luz propia a lo largo de la Historia. Fue la bebida predilecta de descubridores como Colón o Magallanes, glosado por el genial William Shakespeare y elogiado por Fleming como el mejor remedio contra la enfermedades.
Esta comarca atesora más de 3.000 años de tradición enológica, a lo largo de los cuales ha desarrollado métodos de elaboración propios y singulares. Sus privilegiada condiciones climatológicas propician el cultivo de tres variedades de uva: Palomino, de la que se obtienen vinos secos, Pedro Ximénez y Moscatel, ambas utilizadas para vinos dulces.
La combinación de una dilatada historia y la preservación de una de las más singulares y antiguas prácticas vinícolas en el mundo convierten al Jerez en un vino realmente excepcional y único.
El Consejo Regulador de la Denominación de Origen, el más antiguo de España, certifica la calidad y el origen de estos vinos que hunden sus raíces en la Historia. El Jerez ha brillado con luz propia a lo largo de la Historia. Fue la bebida predilecta de descubridores como Colón o Magallanes, glosado por el genial William Shakespeare y elogiado por Fleming como el mejor remedio contra la enfermedades.
La combinación de una dilatada historia y la preservación de una de las más singulares y antiguas prácticas vinícolas en el mundo convierten al Jerez en un vino realmente excepcional y único.
“Saborea en ellos cada rasgo de esta tierra única y descubre una historia de amor al vino que se remonta 3.000 años atrás.”